La Cueva del Lobizón dio una de las grandes sorpresas en esta temporada de fútbol universitario: en su primer año en la Liga logró el título de campeón de la Copa de Plata de la Divisional “I”.
El primer año de un equipo en una liga no es fácil. Para La Cueva del Lobizón tampoco lo fue, pero para el grupo de amigos que se decidió en este 2014 por ingresar a la Liga Universitaria, la temporada terminó con una sonrisa y ahora se entusiasman con poder pelear el ascenso a la “H” en 2015.
Kike Martínez, uno de los jugadores y fundadores del equipo nos contó los pormenores del nacimiento de este club, cómo vio la temporada y qué aspiraciones tiene La Cueva para el 2015.
¿Cómo se formó La Cueva del Lobizón?
Somos un grupo de amigos que se conoció en el Juan XXIII hace diez años, algunos hace más y que siempre tuvimos las ganas de formar un equipo para jugar juntos. Muchos de nosotros estábamos en otros equipos de la Liga, todos en diferentes divisionales, pero la idea de armar algo juntos siempre estaba latente. El fin de año pasado hicimos varias reuniones y fuimos dando pasos para organizar el equipo.
¿A qué se debe ese nombre?
El nombre también viene desde la época de liceales y se mantuvo hasta ahora. Nuestro amigo y presidente Carlos Keosseian en aquella época fue a visitar a su padre (Manuel Keosseian) a Costa Rica, ya que dirigía al Saprissa y su estadio era la Cueva del Monstruo. Entre nosotros ya nos decíamos lobos y quedó. Tiempo después, en un viaje todos juntos había una habitación donde nos reuníamos todos que era la Cueva del Lobo, que después pasó a Lobizón. Historias que vienen de hace tiempo y que queríamos mantener para el nombre del equipo, ya que era significativo para nosotros.
¿Qué les pareció este año en la Liga Universitaria?
Muchos ya jugábamos en la Liga, pero sumamos a amigos que nunca habían participado e hicimos un año muy bueno. Empezamos con algunos problemas de plantel y de adaptarnos, pero con el paso del tiempo y los partidos fuimos mejorando. Igualmente jugar en la Liga va más allá de lo deportivo, ya que el equipo nos permitía vernos muy seguido en prácticas, partidos y sobre todo en los asados y terceros tiempos.
¿Pensaron que se les podía dar un título en el primer año en la Liga?
Empezamos con muchas expectativas y ganas. Pero también sabiendo que nos podía costar arrancar, tener la dinámica de entrenamientos, acoplarnos bien con el Profe Flavio Chagas y el director técnico Martín Valmaggia, que por suerte nos dieron una mano enorme para el armado del equipo. Quedamos en la Copa de Plata, pero nos fuimos enderezando hasta conseguir salir campeones, terminando muy bien el año.
¿Qué balance haces de la temporada de La Cueva?
Teníamos que dar el paso a pesar de que sabíamos del esfuerzo que implicaba armar un equipo de cero. El balance es ampliamente positivo. Crecimos mucho como equipo y ahora queremos seguir mejorando los aspectos que quizás no salieron tan bien.
¿Al ser campeones de la Copa de Plata, toman impulso para pelear el ascenso en 2015?
Ganar un título en la primera temporada que jugamos juntos sin duda que nos dio confianza y muchas ganas de seguir metiéndole cabeza y ganas a este proyecto. Claramente queremos pelear entre los de arriba el año que viene y luchar por el ascenso. Pero creo que lo que más quiere el grupo es poder sumar a los amigos que aún no vinieron a jugar a La Cueva y el retorno de algunos que tambalearon en el camino este año. Somos ante todos muy amigos y entre tanta actividad diaria tener momentos para seguir viéndonos está muy bueno.