Bruno Abbate, delantero que le dio el triunfo a Carrasco Lawn Tennis en la final del Torneo de Honor Sub 20, contó cómo fue jugar en el Estadio Charrúa.
El Torneo de Honor de la categoría Sub 20 tuvo su definición en el Estadio Charrúa con la consagración como campeón de Carrasco Lawn Tennis tras vencer a Seminario por 1 a 0.
Bruno Abbate fue el autor del único gol del encuentro y tras ingresar para jugar los últimos minutos de la final, fue determinante para la conquista del equipo que dirige Miguel Peirano.
“Desde afuera estuvo divertido porque nos sentíamos como profesionales y al principio era medio gracioso, pero con el correr de los minutos nos pusimos un poco más serios afuera y cuando me tocó entrar dije ‘estaría bueno hacer un gol’”, contó el delantero.
Y su deseo se cumplió. A los 78 minutos le quedó una pelota en el área y no perdonó. Puso el 1-0 de Carrasco Lawn Tennis y con ese tanto le regaló el Torneo de Honor Sub 20 a su equipo.
“Obviamente no hice el gol porque dije eso, pero entré y me pasó una cerca. Ahí sí dije que la próxima la tenía que meter y tuve la suerte de que me quedara otra para y pude anotar”, recordó.
“No nos imaginábamos como sería el Charrúa. Las tribunas, jugar en el césped sintético y la verdad que fue increíble poder haber jugado acá”, cerró diciendo el delantero de Carrasco Lawn Tennis.
